Bienvenid@s...

Nuestro blog surge ante la necesidad de plasmar o transmitir nuestros pensamientos, reflexiones, consejos, emociones y hallazgos sobre la vida, de una forma conjunta y tratando infinidad de temas, sin ningún orden establecido. Un trabajo personal, directamente desde nuestra mente y hasta el ultimo pensamiento...
(por Pablo del Castillo y MarcSoul.... y ADA)

martes, 20 de agosto de 2013

Y nos dieron los ojos de gata

¿Que lleva a dos personas a atraerse hasta el punto de dejar que todo lo que surja alrededor de ellos se convierta en indiferente? Os cuento.

Un amigo me contó en su día que conoció a una chica una noche de concierto. Ella estaba tras la barra de un bar de esos que ponen en los locales donde se celebran conciertos al aire libre sirviendo refrescos y cervezas con una camiseta que ponía "organización" y que le quedaba como anillo al dedo como, según me dijo mi amigo, cualquier cosa que ella se hubiera puesto esa noche.

Al pedir la consumición que el calor exigía en una noche de verano típica de pueblo con mar se cruzaron las miradas y aaaamigo. Mi colega estaba más pendiente de las miradas que ella le lanzaba que de lo que decía el cantante que se empeñaba en que todos los allí presenten se interesaran por su repertorio. Tengo que decir que en lo referente a mi amigo no consiguió llegar a tal punto.

Una vez terminó el concierto se quedó en el recinto "a tomarse una ultima birra" con los amigos, cosa que ellos aceptaron sabiendo como estaba el panorama. Una vez pidieron las cervezas, mi amigo y ella se quedaron mirándose de nuevo como un par de gilipollas, pero esta vez solo. Ella le pregunto que a que se dedicaba él y este le contestó que a la música. Tras cantarle algo ella hizo algo que no habían hecho en esa noche, servirle un cubata

Fue cosa de tiempo, sus ojos de gata y lo de mi amigo se cerraron al ritmo de un beso conciliador que duró toda la noche, registrándose en cada farola del camino a la habitación de ese hotel donde ambos decidieron encontrarse con la luna y si le quedaba mejor a ella la ausencia de ropa que lo que llevaba anteriormente (mi amigo dijo que así era).

Se prometieron volver a ver, pero al verano siguiente. Las circunstancias llevaron a que no fuera así, pero la cosa es un buen recuerdo para él pues cuenta que nunca ha sentido nada igual y que duda sentirlo jamás. Y es que esto es así.

A veces no sabemos donde está esa persona hasta que te atrapa eso que nadie sabe explicar a no ser que sea en poemas que nunca llegan a hacernos entender la tontería que nos entra. Me alegro por mi amigo y por Joaquin y Enrique, los cuales escribieron esta historia que os acabo de contar y que me dirían algo si vieran que acaba un poquito mejor que lo que ellos escribieron.


lunes, 19 de agosto de 2013

Pausa, reinicio o cambio?

Llego el dia, hacia poco tiempo que decia extrañado... que raro, este verano no me he puesto enfermo, y asi fue, tras pocos dias cai.

No se si la causa es el deje en mis entrenamientos o el agotamiento que venia sucediendome ultimamente unido a un bajon de defensas, el caso es que cai de manera rotunda, fiebre alta, congestion y dolores por todo el cuerpo.

Quiza necesitaba una pausa y no habia querido tomarmela, lo que si se es que el verano me puede, me agota, sufro mucho la falta de agua, me deshidrato rapido y me agobia mucho correr con temperaturas altas y esta humedad caracteristica del area de levante.

Ultimamente utilizaba la escusa de los acompañantes, buscar alguien que me acompañase a correr, que el compromiso con estos me obligase a salir y hacerlo, e incluso buscar a alguien que me hiciese de liebre y tirase de mi para verme obligado a llevar un alto ritmo y asi no decaer.

Y llego el dia, estaba desgastado, habia reducido al minimo mis entrenamientos y sentia un leve dolor de garganta, pero pense... sera un simple constipado, ademas habia organizado una cenita de sobaquillo con grandes amigos en el paseo maritimo y deseaba verlos aunque suponia que al dia siguiente estaria algo peor de la garganta, merecia la pena.

Y si, todo se gesto esa noche, yo me habia prometido cambiar un poco ciertos aspectos de mi vida, y nose si fue por la mierda que pise de camino al paseo, y si la suerte fue positiva o negativa pero a partir de esa noche todo cambio.

Amaneci el dia siguiente con fiebre y congestionado, tratandome por mi cuenta a base de ibuprofeno pensando que se pasaria rapido, pero todo seguia igual asi que el lunes por la mañana viendo que la fiebre cada vez subia mas, fui a urgencias... resultado: anginas, cama y medicamentos.

Hoy se puede decir que aunque flojo y con problemas estomacales derivados de la medicacion, ya estoy casi recuperado, pero quiero sacar algo positivo de esto; quiza debi parar antes, mi tobillo derecho venia quejandose 1 mes y mi motivacion por correr habia decaido bastante, eso me hace pensar que este paron me sirve para recuperar fuerzas y motivacion y de paso dejar atras las molestias en el tobillo.

No hay mal que por bien no venga.

PABLO.


domingo, 11 de agosto de 2013

pump pump, pump pump, piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii



Pump pump. 
Pump pump.

Duele.

Me empieza a doler el pecho. Mucho. Diría yo que demasiado, para que no sea nada. Me entra ansiedad. Se junta con un dolor inhumano justo donde sentía mi corazón. Empiezo a temblar. Me invade el miedo. No sé que me ocurre. Me quedo rígida, paralizada. Me mata el dolor. Lentamente. No soy capaz de decir ninguna palabra. Empiezo a respirar exageradamente. En mis ojos se puede ver el miedo. Miedo a no saber que ocurre. Si la muerte ha llegado, estoy preparada, pero no quiero seguir sintiendo este dolor. Duele demasiado. Llévame ya, pero que pare este sufrimiento.

Justo en ese momento aparece mi madre asustada por la puerta. La respiración entrecortada y el sonido irreal de mis pulmones la ha alertado. Sabe que algo no va bien, pero me pregunta si estoy bien. Me lee los ojos. No consigo articular palabra. Se asusta. Grita el nombre de mi padre. Entre los dos intentan sacarme palabras, pero no consigo emitir una respuesta. Mi padre me coge en brazos y me lleva hasta el coche. 

Urgencias...otra vez una visita a urgencias. Me lleva preocupado hasta el hospital más cercano. No saben que me ocurre. Solo puedo emitir sonidos de dolor. Cada vez duele más. Me hago un ovillo y grito de dolor. Mi respiración y los sonidos que emito al intentar hablar asustan.

Por favor, que pare ya. No lo soporto. Empiezo a temblar. La ansiedad se adueña de mi. El dolor es muy extraño. Es justo en el pecho. Mi corazón. Qué le ocurre? Soy muy joven para tener un ataque al corazón.

Me atiende un médico. Están preocupados. Sigo sin poder hablar, pero señalo el pecho. Una enfermera dice: es el corazón. Llamar a un cardiólogo. 

Por mis mejillas caen lágrimas como cristales. Como los cristales clavados en mi pecho. Como cientos de puñales. Las lágrimas ahogan un poco el dolor que siento. Es demasiado cruel. Qué hice para merecer esto? Mis ojos se inundan y poco a poco se crea un río diáfano creando formas en mi rostro.

El dolor es tan fuerte que apenas consigo pensar en algo. Solo quiero que cese. Parece que va haciéndose más leve.

Entre médicos, celadores y enfermeras parezco una muñeca con la que jugar. Soy como un maniquí de prácticas con el que probar algunas intervenciones. Me meten en una sala llena de maquinas. Creo que distingo al cardiólogo. Aunque diría que todos parecen iguales con sus batas blancas. Solo pienso en el dolor, no puedo diferenciar mucho. Me sujetan entre 5. Intentan sacarme sangre sin que me mueva. Es difícil. El dolor hace que mi cuerpo sea intocable, como si fuera una culebra que es incapaz de parar quieta. Me retuerzo. Consiguen clavar la aguja. Ni la noto. Comparada con los cientos de puñales que se clavan en mi pecho eso no es nada. No sale sangre. Tienen la vena pinchada, pero no sale sangre...no sale nada. Prueban en otro sitio. Tampoco. No tiene explicación. Me preguntan si me ha pasado otras veces. Consigo mover la cabeza en un gesto de afirmación. Una vez, una enfermera se asustó al ver que la sangre se coagulaba al intentar salir y no conseguia nada, pero no podía explicarselo, a penas podía moverme. Después de varios intentos consiguen extraer un poco de sangre. Está coagulada, como aquella vez. No saben si servirá para las pruebas. Sacan un frasco, bueno en realidad una cuarta parte, pero llevan media hora y no consiguen que salga más.

Intentan auscultarme. El latido es frenético, pero nada fuera de lo normal viendo mi cara, mis movimientos y el dolor que siento. 

Es como si mi cuerpo fuera un cristal. Como si estuviera congelada. La sangre helada, mi cuerpo frio como el de un muerto. Como si me fuera rompiendo a pedacitos.

No es un ataque al corazón. Estaba claro por mi edad. Pero no saben que podría ser. Me hacen miles de pruebas. No consiguen hacerme un electrocardiograma. No da señal. No es posible. Se oyen los latidos desorbitados.  El corazón no responde ante la maquina.

No estás muerta. Lo oigo. Porque no se activa? Dice el médico sin explicación alguna.

Frio, tengo frio. No paran de echarme alcohol para poder conseguir terminar la prueba. Después de tantos intentos consiguen que la maquina haga su función. 

Estaba muerto. El corazón, estaba muerto y helado. Yo estaba congelada. Era la dama de hielo. Solo que muriendo de dolor.

El dolor empieza a parar. Poco a poco se hace más débil. Después de inyectarme más de 6 tranquilizantes y varios goteros...parece que hacen efecto. No me pueden dar nada más. Tengo el triple de dosis para una chica de mi peso y edad, pero no me podían dejar así. Sufriendo. Muriendo de dolor.

Parece que después de todo me empiezo a quedar dormida. Gracias por conseguirlo. Gracias por hacer que vaya desapareciendo este infierno.

Los médicos no saben que me ha ocurrido. Todo parece que mejora. Las pruebas salen bien. No ven nada raro. No debería de haberme ocurrido nada. No se lo explican. 

Vuelvo a la realidad. ya no duele tanto. Ya consigo hablar, pero no sé explicar lo que me había pasado. Me dan el alta. No pueden hacer nada. No saben que me ha ocurrido. Un ataque de ansiedad no crea todas esas cosas. Algo ha cambiado. Pero tan solo lo sé yo. Algo se ha roto dentro de mí. Ha desaparecido.

Cuando sientes cientos de puñales clavándose uno a uno en lo más profundo de tu alma, cuando el aire ya no llega a tu garganta y las palabras son solo suspiros que se escapan, entonces sientes el verdadero dolor. Cuando das todo y ya nada es igual, cuando tus ojos se pierden y las lágrimas proporcionan todo, todo por un amor, entonces, sólo entonces, sabrás lo que es dolor.

Mi vida esta envenenada para siempre por el dolor que he sufrido todos estos años.

Estúpido corazón sin sentido, sin razón por el cual seguir latiendo. Dejemos a un lado las penas y estos dolores, que ya necesitamos morir. Muerte, llévame. No quiero volver a pasar por este dolor. No quiero más visitas en plena noche a urgencias para luego volver a casa sin saber que ha ocurrido.

El dolor es lo peor en esta vida, y más cuando es alguien el que te lo ha causado. Si esa persona a la que amabas te causa dolor, puedes sentir un frío y un dolor tan grande que hasta se para el corazón. Se congela y mueres de dolor. Mueres por dentro.

Decepción tras decepción. Todo llega. Siempre hay un final.

Ese día perdí lo más valioso que tenía. Mi corazón. Es un dolor tan grande que no se puede explicar. No se lo deseo a nadie.

Ahora no siento nada. Me gustaría sentir. Pero no queda nada. Si fuera otra época...ahora sentiría muchas cosas. Pero algo cambio todo. Se llevo mis sentimientos, mis ilusiones, mi miedos, todo. Me quede vacía. Me quede sola. Echo de menos todo aquello.

Somos un todo, una esencia llena de miedos, llena de sentimientos y dolor y cada día algo ocurre y cambia nuestro estado de ánimo, o lo que sentíamos. Pocas veces en la vida, el cupo de dolor llega a su final y todo cambia. Nos convertimos en un recipiente vacío. En seres de hielo, inertes, inmóviles, exánimes, indefensos. Dejamos de sentir. Ya no sentimos amor, dolor, pasión, nada. Tan solo nos quedan los pecados capitales. Al menos aun nos queda algo. Lujuria, pereza, gula, ira...aun queda algo de odio. Quizás, me haya convertido en una mala persona. Pero este es mi final. El mundo me hizo así. El destino me ha creado como ahora soy. No estoy contenta por ello, pero es lo que hay.

Sé que ahora no volverá a funcionar nada igual. Sea como sea, llegas demasiado tarde, quizás con muchas lágrimas de retraso y miles de sueños rotos. Además, llegas en el momento equivocado, en el que todo parece haber terminado. En el que mi vida ha llegado a  su fin y ya no queda nada. Si quieres quédate, pero ya sabes la verdad. Tu eres dueño de ti y de hacer lo que te plazca con tu vida. Pero yo te avisé, luego no me lo eches en cara. Eres libre de intentarlo, eres libre de luchar para que todo vuelva a ser como antes, pero llegas tarde...muy tarde... yo ya perdí la esperanza. Y tú?

ADA



Tócame, hasta hacerme sentir tu ternura infinita, tócame, para que pueda gozar de tu calor y de tus ganas de amarme, tócame eternamente para que pueda volver a sentir y llenar este hueco vacio.
Manchas, sangre. Sueños y juegos de críos. sálvame de líos, cúrame el dolor y devuélveme lo que era mío.
Sangra por los dos o guárdame del frio. Todo por unos labios que me curen las heridas y me devuelvan al camino.               

lunes, 5 de agosto de 2013

Africa... ¿Que hemos aprendido?

Después de una larga tarde de reflexión y recogimiento y tras haber visto varias películas y documentales, centro mis pensamientos en África, ese continente tan cercano y a la vez tan distante.


¿Que es África? ¿Por que es así? y... ¿en que hemos contribuido para que así sea?




Si te pones a pensar piensas en tantos años de ocupación extranjera, en todas aquellas naciones... España, Francia, Italia, Gran Bretaña, Portugal, Holanda... que en sus ansias de expansión invadieron y sometieron a todos estos países que conforman el continente negro.

Llego el día de partir, unos antes y otros después, y fueron cediéndoles la independencia, no si antes asegurarse una futura y permanente influencia en los asuntos internos de todos y cada uno de los países a los que concedían dicha "autonomía", y tampoco sin haber explotado a sus anchas todos los recursos de los que estos disponían...

No nos engañemos, las potencias extranjeras trajeron progreso, pero también y en mucha mayor medida, desolación, hambruna, guerras, segregaciones, racismo y dictaduras que han desolado el continente de cabo a rabo.

Podría haberse hecho de mejor manera, pero no, la culpa de que África sea hoy en día lo que es, de que en pleno siglo 21, continúen viviendo en la edad de piedra, que además coexistan con enfermedades que en otros lugares se han erradicado, que se les haya explotado hasta la saciedad, de que no sean dueños ni de los propios recursos de su país, de que mueran de hambre diariamente, de que "alguien" haya plantado la semilla de la desagregación racial, de que se enfrenten por motivos étnicos y religiosos, de que unos ejércitos sean tan poderosos porque la "a la metrópoli le interesa por eso los apoya y por eso los arma" y otros no, es única y exclusivamente nuestra.

Vemos en las noticias diariamente casos de este tipo y nos sentimos mal, pero en el fondo sabemos que todo esto pasa en mayor o menor medida porque nuestros gobernantes miran hacia otro lado mientras esto pasa, porque les viene bien que exista un tercer mundo al que someter y al que ir a hacerse fotos cuando mandamos un avioncito cargado de arroz...

Existe la manera de hacer que poco a poco estos países se desarrollen, y es tomando la determinación de contribuir activa y decisivamente en su desarrollo para poco a poco paliar la desigualdades entre ambos "mundos", creo que es un deber nuestro y una obligación recompensarles por tantos años de sometimiento, tantos años quitándoles deberían de recompensarse con otros tantos de ayudarles y darles para que puedan crecer.

PABLO.